El jefe de la Policía de la región de Kiev, Andriy Nebytov, informó este 15 de abril que las autoridades han encontrado más de 900 cadáveres de civiles a las afueras de Kiev, tras la partida de las tropas rusas. Entretanto, varias explosiones se escucharon en la capital, mientras Moscú advierte que “intensificará” sus ataques allí tras acusar a las tropas de Volodímir Zelenski de presuntamente bombardear y dañar 20 edificios y una escuela, en la ciudad rusa de Belgorod.
Los cadáveres de más de 900 civiles han sido descubiertos en la región que rodea la capital ucraniana, Kiev, tras la retirada de las fuerzas rusas, la mayoría de ellos con heridas de bala, informó la policía este viernes 15 de abril.
La cifra fue dada a conocer poco después de que el Ministerio de Defensa de Rusia prometió intensificar su ofensiva con misiles contra Kiev en respuesta a los supuestos ataques de Ucrania en suelo ruso. La advertencia se hizo tras la sorpresiva pérdida del buque insignia de Moscú en el Mar Negro, el cual de acuerdo con un alto funcionario de defensa de Estados Unidos fue alcanzado por al menos un misil ucraniano.
En medio de sus amenazas, Moscú seguía preparándose para su renovada ofensiva en el este de Ucrania. La lucha continuaba también en la devastada ciudad sureña de Mariúpol, donde los lugareños informaron haber visto a efectivos rusos enterrando cadáveres. En la ciudad nororiental de Járkiv, el fuego de artillería contra una zona residencial dejó siete muertos, incluido un bebé de 7 meses, y 34 heridos, según el gobernador regional Oleh Sinehubov.
En los alrededores de Kiev, Andriy Nebytov, jefe de la policía regional de la capital, dijo que los cuerpos fueron abandonados en las calles o se les dio sepultura temporal. Citó información de la policía que indicaba que 95 % de esas personas murieron por herida de bala.
“En consecuencia, entendemos que bajo la ocupación (rusa), la gente fue simplemente ejecutada en las calles”, aseguró Nebytov.
Cada día se encuentran más cadáveres, bajo los escombros y en fosas comunes, añadió. Dijo que el mayor número de víctimas se encontró en Bucha, con más de 350.
Según Nebytov, los trabajadores de empresas de servicios públicos de Bucha recogieron y enterraron los cadáveres en el suburbio de Kiev mientras este permanecía bajo control ruso. Las tropas rusas, añadió, estaban “rastreando” a las personas que expresaban fuertes opiniones proucranianas.
El presidente ucraniano Volodímir Zelenski acusó a las fuerzas rusas que ocupan partes de las regiones de Jersón y Zaporiyia, en el sur, de aterrorizar a civiles y perseguir a quienes formaron parte del ejército o el gobierno de Ucrania.
“Los ocupantes piensan que eso les facilitará controlar este territorio. Pero están muy equivocados. Se engañan”, dijo Zelenski. “El problema de Rusia es que no es aceptada —y jamás será aceptada— por todo el pueblo ucraniano. Rusia ha perdido a Ucrania para siempre”.
En su discurso nocturno en video dirigido a la nación, Zelenski también dijo que discutió la suerte de Mariúpol con la cúpula militar y funcionarios de inteligencia. Señaló que no podría ofrecer detalles, “pero estamos haciendo todo lo posible para salvar a nuestro pueblo”.
Zelenski dijo que la paz y “cuántos ucranianos más los ocupantes tendrán tiempo para asesinar” dependen de que Ucrania reciba más apoyo externo, y reiteró su llamado a que se brinde más ayuda militar y de manera más rápida, y a que se aplique un embargo petrolero a Rusia.
Una violencia mayor podría deparar a Kiev después de que las autoridades rusas acusaron a Ucrania de causar heridas a siete personas y dañar unos 100 edificios residenciales con ataques aéreos en Bryansk, una región limítrofe con Ucrania. Las autoridades de otra región fronteriza de Rusia también informaron haber sido atacadas el jueves por Ucrania con fuego de artillería.
“El número y la escala de los ataques con misiles contra objetivos en Kiev se intensificarán en respuesta a que el régimen nacionalista de Kiev cometa cualquier ataque terrorista o distracciones en el territorio ruso”, declaró el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov.
Rusia utilizó misiles para destruir una instalación de reparación y producción de sistemas de misiles en Kiev, afirmó Konashenkov.
Las autoridades ucranianas no han confirmado los ataques contra objetivos en Rusia, y los reportes no pudieron ser verificados de manera independiente.
Sin embargo, las autoridades ucranianas dijeron que sus fuerzas atacaron con misiles un importante barco de guerra ruso. Un alto funcionario de defensa estadounidense ratificó la aseveración y dijo que Estados Unidos ahora cree que el Moskva fue alcanzado por al menos un misil antibuques Neptuno, y posiblemente por dos. El funcionario solicitó el anonimato para hacer declaraciones sobre una evaluación de inteligencia.
El Moskva, que llevaba el nombre de la capital rusa, se hundió cuando era remolcado a puerto el jueves tras sufrir daños graves. Aunque Moscú no reconoció ataque alguno y sólo se limitó a decir que un incendio había causado la explosión de munición a bordo, la pérdida del barco representa una victoria importante para Ucrania y una derrota simbólica para Rusia.
El hundimiento del buque ruso reduce enormemente la capacidad ofensiva de Rusia en el Mar Negro, aunque analistas militares no coinciden sobre la importancia del acontecimiento para el curso de la guerra.