Nicolás Maduro lo hizo de nuevo. El consumo de gasolina en Venezuela es nuevamente el tema del día en la nación sudamericana, y es que tras un periodo de gracia por la llegada de los buques con combustible iraní, sucedió lo inevitable y los tanques de las estaciones de servicio se vaciaron.
Durante la tercera semana del pasado mes de mayo empezaron a llegar las embarcaciones provenientes del país árabe, quienes transportaron un aproximado de 1.5 millones de barriles en cada buque y desde un principio se informó que eso alcanzaría para un total de 30 días, pero debido a las altas restricciones, se alargó el proceso hasta agosto.
Gasolina en Venezuela
Ya el Gobierno de Venezuela empezó a negociar el envío de otra carga de la tan preciada gasolina, e incluso ya había adelantado el pago predilecto por Maduro y su grupo: Oro.
Según el Departamento de Estado de EEUU, la dictadura se encargó de trasladar hasta 9 toneladas del mineral a cambio que Irán le garantizara el combustible y para esta ocasión pactaron lo mismo.
Pero lo que no tenían en cuenta eran las amenazas que la administración Trump hizo a Maduro, y es que tarde o temprano embargaría la carga de los buques y lo realizó sin necesidad de usar la fuerza armada para ello.
Se quedó sin oro
El portal “CNW” confirmó que los barcos que iban con rumbo a entregar la gasolina en Venezuela fueron desviados a Estados Unidos ante el temor de ser sancionados, lo que de llegar a concretarse imposibilitaría a sus propietarios volver a realizar un servicio.
“Se quedó sin chivo ni mecate”, una jerga criolla usada con mucha frecuencia por los venezolanos sin lugar a dudas calza perfectamente con la situación que Nicolás Maduro está atravesando actualmente con el combustible.
Entregó el oro a la espera de la gasolina en Venezuela para este mes de agosto, pero ya no será así e Irán no se lo devolverá.