Tras presentar su informe al Congreso de la República, el Presidente del Banco de Guatemala, Sergio Recinos, señaló que debido a la pandemia del COVID-19, el cierre de este año la economía del país se verá afectada, pero el 2021 tendrá un crecimiento sustancial.
En las economías avanzadas, el crecimiento registraría una contracción severa en 2020 (-8.0%), ante la considerable reducción de la confianza y de los ingresos del sector privado; no obstante, se anticipa que COVID-19 y de que las medidas implementadas en otros países provocarían que los flujos de remesas familiares, de exportaciones, de inversión extranjera directa y de turismo, se contraigan. En el caso de las remesas familiares, éstas se contraerían más en El Salvador y en Honduras que en Guatemala. La recuperación en 2021 provendría de los efectos de las medidas económicas adoptadas, así como de la recuperación prevista de los principales socios comerciales de la región, especialmente de los Estados Unidos de América.
Los precios internacionales de las materias primas que pueden tener un impacto relevante en la inflación de Guatemala disminuyeron en comparación con los precios observados a finales de 2019. En el caso del petróleo, los precios se redujeron hasta abril, como consecuencia de que se generó un exceso de oferta, asociado, por una parte, a que la demanda mundial de crudo disminuyó en el contexto de la pandemia.
Según Recinos, las condiciones económicas también se han deteriorado, como ha sucedido en todo el mundo, de las medidas sanitarias y de distanciamiento social que implementó el Gobierno desde la tercera semana de marzo. para contener la propagación del COVID-19, así como de la caída sincronizada de las economías de los principales socios comerciales del país, aunque se prevé que la actividad económica sea apoyada por la postura ampliamente acomodaticia de la política monetaria y las medidas de carácter contra-cíclico implementadas por la política fiscal.
Derivado de ello, el Producto Interno Bruto (PIB), durante el primer trimestre de este año, registró un aumento de 0.7%, y se proyecta que el crecimiento del PIB anual en 2020 se ubique en un rango de entre -3.5% y -1.5%, resultado, principalmente, del deterioro de la demanda interna, debido, fundamentalmente, a la caída prevista en el consumo privado y a la reducción en la demanda externa de bienes y servicios nacionales, esto asociado a expectativas menos favorables para la actividad económica de los principales socios comerciales del país.
Explica el presidente del Banguat, que al mes de mayo pasado , la variación interanual de la tendencia-ciclo del Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE), fue de -7.3%, como consecuencia de las medidas sanitarias implementadas para evitar la propagación del COVID-19 y de la desaceleración económica mundial; comportamiento que es congruente con el rango de crecimiento previsto para el presente año, dado que se espera una recuperación de la economía a partir del segundo semestre del año, previendo que el PIB crezca en un rango entre 2.0% y 4.0% en 2021.
Al 30 de junio, el ingreso de divisas por remesas familiares alcanzó un monto de US$4,880.2 millones, inferior en US$46.7 millones (0.9%), respecto al monto observado en igual periodo del 2019. Durante enero y febrero de este año, el flujo de remesas familiares mostró un crecimiento dinámico, debido, principalmente, a que el desempleo hispano en los Estados Unidos se mantuvo en niveles históricamente bajos. el flujo de remesas familiares empezó a desacelerarse a partir de marzo, llegando a registrar variaciones interanuales negativas desde abril, aunque empezó a mostrar cierta moderación a partir de mayo, se espera que registre una disminución en 2020, consecuencia de la caída prevista en la actividad económica estadounidense; sin embargo, dicho flujo, en términos nominales (en dólares estadounidenses), continúa siendo importante para los guatemaltecos.
Recinos, explicó también que al 30 de junio pasado, el nivel de Reservas Internacionales Netas (RIN), registró un monto de US$16,991.8 millones, mayor US$2,202.8 millones respecto al 31 de diciembre de 2019, resultado, principalmente, de las compras netas por activación de la regla cambiaria (US$600.00 millones), del mecanismo de acumulación de reservas (US$258.0 millones),
El informe del Banguat presentado al Congreso de la República, destaca la colocación de Bonos del Tesoro en el mercado internacional de US$1,200.00 millones, lo cual fue compensado, parcialmente, por los pagos netos por deuda externa del sector público. El referido nivel de RIN equivale a 11.0 meses de importación de bienes, lo que refleja la sólida posición externa del país.