El fracking es una técnica utilizada para mejorar la extracción de gas y petróleo. Sin embargo, este proceso tiene repercusiones en el medio ambiente y en la salud.
En la tarde del pasado miércoles 16 de junio del 2021, en la Comisión Quinta de Cámara de Representantes se hundieron los proyectos de ley que buscaban la prohibición del fracking y la explotación de yacimientos no convencionales en Colombia.
Los proyectos se hundieron con 15 votos a favor y 4 en contra.
Ante el hundimiento que le da de cierta forma luz verde al fracking en Colombia, es importante saber en qué consiste y las implicaciones que esto conlleva, tanto para el medio ambiente, como para la salud.
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¿Qué es el fracking?
El fracking (fracturación hidráulica, traducido al español) es una técnica que permite mejorar la extracción de gas y petróleo del subsuelo.
Para esta, se inyecta a presión algún material en el suelo, de modo que las fracturas que ya existen en las rocas del interior de la tierra aumenten y liberen el gas o el petróleo, que saldrá hacia el exterior.
Normalmente, lo que se inyecta, es agua con arena, aunque en algunos casos también se puede utilizar algún tipo de espuma o gases.
Cabe destacar que con esta técnica se mejora la extracción de los hidrocarburos.
Sin embargo, los daños ambientales son muy devastadores.
Foto: OVACEN.
Daños ambientales
Contaminación del agua, escases y cantidades exorbitantes para la implementación de esta práctica
Durante este proceso, una importante cantidad de gas metano y otros productos químicos tóxicos se filtran desde el pozo y contaminan las aguas subterráneas, con las que las comunidades locales tienen fácil acceso.
Asimismo, un solo pozo puede producir casi 4 millones de litros de aguas residuales, la cual contiene elementos radiactivos como el radio y varios hidrocarburos que son cancerígenos, como el benceno.
Es importante resaltar que las concentraciones de metano son 17 veces mayores en las capas subterráneas cercanas a los sitios de rompimiento, que en los pozos normales.
Cerca del 90 % del agua utilizada en esta técnica nunca regresa a la superficie, puesto que el agua se retira de su ciclo natural.
La reasignación de los suministros del agua para la industria del fracking, no solo causa que los precios del agua se eleven, sino que también reduce la disponibilidad para otros usos, como el riego de cultivos.
Por otro lado, el fracking usa entre 4.5 y 13.2 millones de litros de agua por pozo y, en los proyectos grandes, hasta 19 millones de litros por pozo. Se necesita agua adicional cuando los pozos se re fracturan.
Se ha calculado que, durante su vida útil, las operaciones de un solo pozo promedio requieren entre 9 mil y 29 mil metros cúbicos, o sea 9 y 29 millones de litros de agua.
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Terremotos
Unos de los daños ambientales al realizar fractura hidráulica son los terremotos, ya que se ha confirmado que el proceso de esta técnica los povoca.
A causa del fracking, durante los últimos 7 años, ciertas regiones geológicamente estables han experimentado movimientos en las fallas que no se habían movido en millones de años.
Tal es el caso de Arkansas, ohio, oklahoma, Colorado y Texas, lugares los cuales nunca tuvieron actividad sísmica.
Sin embargo, por implemnetar esta técnica, en años recientes se han multiplicado los sismos superiores a los 3° en la escala de Richter, cuyos epicentros coinciden con la ubicación de los pozos de inyección.
Por su parte, en Youngdtown, Ohio, los sismos antropogénicos han llegado a ser hasta de 5.7°.
Foto: Xataka.
Daños a la salud
El fluido residual dejado por el proceso de fractura hidráulica se deposita en fosas a cielo abierto para que se evapore, librando asó peligrosos compuedtos órganicos volátiles a la atmósfera, contaminando el aire, generando lluvia ácida y aumentando los índices de ozono a nivel del suelo.
Adicionalmente, la exposición a partículas de sulfuro de hidrógenos e hidrocarburos volátiles puede provocar problemas a la salud como:
Asma
Dolores de cabeza
Presión arterial alta
Anemia
Ataques al corazón
Cáncer
Puede afectar los sistemas inmunológico y reproductivo, así como en el desarrollo embrionario
Al igual que los pequeños fragmentos de sílice, utilizados en esta técnica pueden llegar a dificultar la respiración y causar irritación respiratoria, tos, obstrucción de las vías y una mala función pulmonar.
También, una larga exposición a este elemento (sílice), puede provocar inflamación pulmonar, bronquitis, enfisemas y una enfermedad grave conocida como silicosis, una forma de fibrosis pulmonar.
Por otra parte, un estudio reciente de la Universidad Johns Hopkins, encontró que las casa cercanas a los sitios de fractura hidráulica tienen una concentración de radón (la segunda causa mundial de cáncer de pulmón después del tabaquismo) un 39 % más altas que aquellos ubicados en lugares alejados del fracking.
Es imprescindible resaltar que el radón es un gas radiactivo natural, inodoro, insípido, invisible y soluble, por lo que algunos restos disueltos pueden aparecer en los pozos de agua y en partes subterráneas.
