Tres mil voluntarios, entre los 18 y 60 años, priorizando inicialmente reclutar al personal de salud, debido a que son personas que tienen mayor posibilidad de contraer el virus.
Buscando medir la efectividad de la vacuna y tras pasar las pruebas de seguridad, los estudios clínicos de fase tres del laboratorio chino Sinovac darán su primer paso durante la próxima semana, donde se empezará a contactar a los primeros posibles voluntarios chilenos.
Las pruebas se realizarán principalmente en personas que trabajen el área de la salud, que se encuentren sanas, entre los 18 y los 60 años, con prioridad para adultos jóvenes y con el requisito de que los voluntarios no tengan patologías de base, ni enfermedades agregadas. Será posible que los participantes sean de la Región Metropolitana y de distintas regiones del país, gracias a la formación de un consorcio de universidades que permitirá realizar esta prueba en todo Chile.
El protocolo tendrá una extensión de varios meses e incluirá la administración de dos dosis y evaluación de permanente para medir la generación de anticuerpos del organismo, los cuales son los que hacen posible la protección.
De la tres mil personas serán contactadas durante este mes de agosto, un porcentaje de los voluntarios recibirá la vacuna, virus inactivado, y otros placebo, un preparado sin vacuna. Las personas no serán notificadas sobre cuál se les administró, para medir ciertos efectos.
Los encargados de ejecutar este trabajo serán, por ahora, las ocho universidades que son parte de este consorcio, entre las que destacan la U. de Antofagasta, U. Austral, U. de Chile, U. del Desarrollo y U. de los Andes, entre otras.