Japón donó US$4,7 millones de dólares a Colombia para la compra de maquinaria de alta tecnología, destinada al fortalecimiento de la red hospitalaria de 12 departamentos del país para hacerle frente a las consecuencias provenientes del coronavirus.
Japón donó cerca de 500 millones de yenes (US$4,7 millones de dólares aproximadamente), los cuales se destinarán a la compra de maquinaria japonesa, con el fin de fortalecer la red hospitalaria de 12 departamentos de Colombia. Con la firma de esta donación entre la ministra de Relaciones Exteriores, Claudia Blum, y el embajador de Japón, Morishita Keiichiro, se establecen las condiciones correspondientes que accederán a iniciar la logística de compra y transporte de los equipos con tecnología de punta en Colombia.
Los equipos llegarán a hospitales de zonas en estado de vulnerabilidad, ya sea por el número limitado de estos o por el alto porcentaje de pacientes positivos para COVID-19 y en estado crítico por diversas enfermedades.
La donación hace parte del Programa de Cooperación para el Desarrollo Económico y Social de Colombia, dirigido por la Agencia presidencial de Cooperación Internacional de Colombia, APC – Colombia.
Claudia Blum recalcó la generosidad histórica de Japón hacia Colombia, el cual es uno de los principales socios del país en la cooperación para el desarrollo y asistencia humanitaria.
Se expresó, a manera de ejemplo, a las contribuciones de Japón a la eliminación de minas en Colombia por medio de equipos, cooperación técnica y al apoyo de ese país para atender el problema migratorio.
Adicionalmente, la ministra resaltó la importante contribución de Japón en apoyar el esfuerzo internacional por enfrentar el coronavirus y recordó que en estos momentos difíciles es cuando se fortalecen más, los lazos de amistad entre países hermanos.
Por otra parte, el país de Japón mantiene su compromiso de apoyar la lucha internacional en contra de este tipo de “enfermedades infecciosas”.
El pasado 25 de mayo de 2020, el primer ministro de Japón, Abe Shinzo, comunicó que “no es posible resolver de raíz este problema mundial por medio de una mentalidad introspectiva. Estamos en ese momento en el que debemos sumarnos firmemente a los valores universales de la libertad, la democracia, los derechos humanos básicos y el estado de derecho. Y, Japón debe, de manera libre y abierta, liderar los controles de enfermedades infecciosas del mundo, trabajando mano a mano con los países que comparten estos valores”.