El apellido de Leo Fender es de fácil recordación para quienes tengan un acercamiento (por mínimo que sea) a la cultura en Norteamérica y el mundo.
Clarence Leonidas Fender, fundador a su vez de la Fender Electric Instrument Manufacturing Company en la década de 1940, no es simplemente famoso desde hace muchos años por suplir las necesidades de numerosos intérpretes musicales.También desde luego, por marcar una línea en estilos musicales como el rock, pop, country, jazz, rhythm and blues, entre muchos otros.
Nacido justamente un 10 de agosto pero del año 1909, su ambiente de niñez fue el de las zonas rurales en Anaheim, Orange (California).
Encontrando desde joven su vocación natural hacia la electrónica, comenzó reparando pequeños dispositivos de radio y aprendiendo de manera autodidacta los pormenores de su oficio.
Paradójicamente no interpretaba instrumentos de cuerda. Sin embargo, si tocaba el piano y el saxofón, pese a estar absolutamente enfocado en la fabricación de piezas sonoras sobre el hecho de ejecutarlas.
Radicado después en el poblado californiano de Fullerton, y al ser despedido de su trabajo como contador, estableció un pequeño negocio de reparación, mantenimiento y alquiler de equipos de audio, llamado Fender Radio Service.
El tiempo pasaría y dos factores influyeron en la brillante carrera del futuro lutier: Su imposibilidad de prestar servicio militar en la Segunda Guerra Mundial y los nacientes movimientos artísticos que exploraría la sociedad estadounidense, determinantes por usar piezas de cuerdas replicadas por la electricidad.
Tras pequeñas incursiones en la fabricación de guitarras tipo lap steel, algunos trabajos en conjunto con amigos y esporádicos socios, se dedicaría formalmente a la fabricación y comercio de bajos, guitarras y amplificadores en serie, perfeccionando su desempeño.
A mediados del siglo XX las orquestas estaban perdiendo popularidad y los músicos estaban optaron por instrumentos que destacaran con mayor potencia su presencia en el escenario. Fue el momento entonces para los productos Fender y sus lanzamientos.
Era difícil imaginar la multitudinaria acogida que sus guitarras y bajos tomarían por casi seis décadas, cuyos diseños fueron muy criticados en su comienzos. Actualmente, indispensables en el imaginario popular.
En los años sesenta, Leo Fender vendió su compañía a la Columbia Broadcasting System (CBS). Permanecería activo creando y superando las propias versiones de sus inventos hasta su muerte, en el año 1991.
Dilemas de identidad corporativa y calidad de la mercancía llevó a que los empleados de la marca adquirieran la empresa a CBS, rebautizada como la Fender Musical Instrument Corporation.