El tifón Nanmadol ha dejado a su paso por la isla de Kyushu, en el suroeste de Japón, cuatro muertos y un centenar de heridos, así como unas 300.000 viviendas sin electricidad, precipitaciones récord e infinidad de ríos en condiciones de desbordarse, según la cadena de radiotelevisión pública NHK.
«Quiero que cada ministro reduzca los daños y haga todo lo posible para garantizar la seguridad de la población, así como que cooperen estrechamente con los gobiernos locales en la zona de la catástrofe», dijo el primer ministro nipón, Fumio Kishida, durante una reunión con su gabinete.
En Tanegashima, al sur de la isla de Kyushu, un muro en el centro espacial de la Agencia Aeroespacial y de Exploración de Japón sufrió daños, informó el Ministerio de Economía e Industria. Hoy los expertos siguen evaluando la magnitud de los daños en el edificio, el cual es utilizado para el ensamblaje de cohetes.
El Centro Conjunto de Alerta de Tifones de Estados Unidos clasificó a Nanmadol como un “súper tifón” que se caracteriza por originar vientos sostenidos de 240 kilómetros por hora o más y es el equivalente a un huracán de categoría cuatro o cinco.
Tras azotar el sur de Japón, la tormenta bajó de intensidad, se transformó en lo que llaman un ciclón extratropical y cambió su rumbo hacia el Océano Pacífico frente a la costa norte del país, informó la Agencia Meteorológica de Japón.
Typhoon #Nanmadol transitioned into an extratropical cyclone on Tuesday. It is raining heavily in northern and eastern Japan where the risk of landslide disasters is high. #EarlyWarningEarlyAction@JMA_bousai updates:https://t.co/okQnAkHRwb
Details: https://t.co/dDsY76nW3v pic.twitter.com/Zuhfbv6cHz
— World Meteorological Organization (@WMO) September 20, 2022